Oficinas Centrales 917 082 439 Acceso Familias
Nuestras Webcam

Recomendaciones sobre flotadores y riesgos

Recomendaciones sobre flotadores y riesgos
29 / junio / 2020

Desde KidsCare, servicio de pediatría de las Escuelas Infantiles Nemomarlin, os queremos mostrar estas recomendaciones ahora que llega el verano.

Antes de entrar en la materia de los flotadores queremos transmitir que cuando los bebés o los niños pequeños estén dentro o alrededor del agua, bien sea piscina o cualquier superficie abierta de agua, deben de estar al alcance y supervisados por un adulto con experiencia.

Para que esta vigilancia sea adecuada, la distancia al menor debería ser inferior a la longitud del brazo del cuidador, es decir que hay que tenerlos al alcance. No debe suponerse que el niño no corre ningún riesgo de ahogamiento porque haya hecho un curso de natación o lleve un dispositivo de flotación.

Los flotadores más seguros son los chalecos. Se recomienda evitar los flotadores redondos, los manguitos o las burbujas de espalda no son una protección eficaz contra el ahogamiento.

En el caso de utilizar un chaleco salvavidas, debe ser de la talla del niño, estar homologado y usarlo siempre que el niño esté cerca del agua.

La Asociación Española de Pediatría y la Real Federación Española de Salvamento y Socorrismo recomienda la utilización de chalecos de flotación no hinchables desde los 3 años hasta los 6 años de edad. Por tres razones lógicas:

  • No existe riesgo de pinchazo o rotura.
  • No existe riesgo de separación del aparato de flotación del niño.
  • Mantendrá sin esfuerzo la cabeza fuera del agua.
  • Y como ventaja accesoria. Protege en mayor medida de los rayos solares.

Recientemente se han comercializado unos flotadores que se colocan alrededor del cuello para que sean utilizados por los bebés. En la actualidad no hay estudios que demuestren que la utilización de flotadores en el cuello produzca ningún beneficio en los bebés. La Asociación Española de Pediatría no recomienda el uso de flotadores de cuello.

Aprovechamos a recordaros algunos consejos de seguridad para que los más pequeños puedan disfrutar de las actividades en el agua:

  • En lugares como playas, los padres deben estar atento al oleaje que puedan derribar a los niños y sumergirlos. En el caso de las piscinas, habrá que prestar atención a la profundidad.
  • Los niños que ya nadan, aunque sea en una piscina poco profunda para niños pequeños, siempre deben ser observados por un adulto, proporcionando “supervisión donde pueda agarrarlos” cuando los bebés o niños pequeños caigan.
  • Dar a conocer las reglas de seguridad y hacerlas cumplir en el agua.
  • No permitir que los hijos usen juguetes o colchones hinchables como si fueran chalecos salvavidas.

Califica esta entrada
¡Haz clic para puntuar esta entrada!
(Votos: 0 Promedio: 0)

También te puede interesar